La Generalitat de Cataluña ha asegurado este viernes que el 1 de octubre están llamados a votar 5.343.358 catalanes en el referéndum independentista que quiere celebrar el Govern, anulado por el Constitucional, y ha enseñado las urnas que se usarán en la consulta. Poco antes, las consejeras de Educación, Clara Ponsatí, y Trabajo, Dolors Bassa, han anunciado que asumen las funciones de los directores de colegios y responsables de centros cívicos con el fin de eximirles de responsabilidad jurídica de cara al referéndum. La Agencia Estatal de Protección de Datos ha advertido a los catalanes llamados a formar las mesas electorales de la consulta que se exponen a sanciones de hasta 600.000 euros por posibles infracciones por el manejo fraudulento y cesión a terceros del censo electoral. Esta tarde, el consejero de Justicia, Carles Mundó, ha anunciado una querella contra el fiscal general del Estado, José Manuel Maza, y contra el fiscal superior de Cataluña, José María Romero de Tejada, por delitos de "prevaricación, usurpación de funciones y contra el ejercicio de los derechos civiles". Por su parte, el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, ha ordenado al cuerpo que dirige desalojar sin violencia y cerrar los colegios electorales el domingo a las seis de la mañana.

La Generalitat de Cataluña ha enseñado este viernes por sorpresa las urnas que se usarán en la consulta del referéndum del 1 de octubre, una especie de contenedores de plástico blanco traslúcido con tapa negra y el logo de la Generalitat.

Así son las urnas del 1-O: de plástico, fabricadas en China, y con un precio de entre 5€ y 7€
La empresa china Smart Dragon Ballot Expert, situada en Guangzhou, al sur del país, fabrica urnas iguales a la mostrada por la Generalitat. Según Sally Liang, comercial de esta compañía china, la empresa ha enviado recientemente 10.000 urnas a Francia, pero no a España. Liang ha confirmado que su compañía fabrica este tipo de urnas, pero "otras compañías también la hacen". La compañía ha hecho urnas desde 2008 sobre todo para países asiáticos y africanos: Papua, Australia, Chad, Ghana, Níger o Nigeria. El único país europeo para el que ha trabajado es Lituania. Las urnas del reciente referéndum en Kurdistán eran del mismo tipo. Otros países europeos, como Países Bajos, usan este tipo de urnas opacas.
Smart Dragon vende sus productos a través de la web de comercio online Alibaba. Para unas recientes elecciones, la empresa vendía estas urnas a un precio entre cuatro y cinco euros por unidad, dependiendo de la cantidad comprada. La empresa fue fundada en 2002, tiene unos ingresos anuales de más de 100 millones de dólares (84 millones de euros) y entre 100 y 200 empleados, según su perfil en Alibaba.
La empresa no ha confirmado oficialmente que sea ella la proveedora del gobierno catalán. Sin embargo, su modelo es idéntico al escogido por la Generalitat. Según explica la propia empresa, ha estado trabajando en el campo de la elección de suministros desde el año 2007, cuando compraron su primera máquina moldeo por inyección.

El modelo que empleará la Generalitat tiene un diseño apilable, está compuesta al 100% de polipropileno, el diseño lo escoge el cliente y puede ser semitransparente u opaco. De hecho, la empresa da la opción de una escala de transparencia: 0%, 50%, 70%, 90%. Y la Generalitat ha optado por que sean 100% opacas. De hecho, el decreto complementario 140/2017 del 6 de normas complementarias para la realización del referéndum de autodeterminación, se establece que las urnas deben ser "de un material resistente con una tapa que incluirá una ranura en el centro por donde se introducirán los votos. La tapa cerrará completamente la urna, que deberá precintarse antes del inicio de la votación".
No obliga a que sean transparentes, como sí lo fija la legislación española, en el Real Decreto 605/1999, del 16 de abril: "Serán de un material resistente y transparente".
La propia empresa fabricante, en la descripción del producto señala que la urna cuenta con una ranura estrecha en la parte superior suficiente para "introducir una papeleta de votación, pero que impide que cualquier persona tenga acceso a los votos emitidos hasta el cierre del período de votación.
El pedido mínimo que admite esta empresa es de 500 piezas y su precio oscila entre 5 y 9 dólares cada urna -es decir, entre 4,23 y 7,62 euros-, según el volumen del pedido que se realice. Esta empresa podría suministrar una cantidad como la que necesita la Generalitat para su referéndum del 1-O por entre 22.000 y 35.200 euros.
La Generalitat catalana ha anunciado que habrá un total de 5.200 mesas electorales distribuidas entre 2.300 colegios. Lo que significa que, como mínimo, habrá comprado 5.200 urnas.
Smart Dragon Ballon Expert detalla que cuenta con una logística que le permite fabricar 6.000 urnas diarias como las que ha empleará el Govern. Y cifra el tiempo de entrega el pedido en 20 días laborables desde que se efectúe el pago.