Pedro Sánchez ha regresado este sábado a Cataluña para reforzar la posición socialista de oponerse al referéndum del 1 de octubre y reivindicar la reforma constitucional como la única alternativa a la situación política catalana. El líder del PSOE no ha escatimado críticas al independentismo y a su deseo de convertir el 1 de octubre en una moción de censura a Mariano Rajoy. "Pudieron hacerlo y se opusieron", ha dicho Sánchez al recordar que tanto PDeCAT como Esquerra Republicana votaron en contra de su candidatura para llegar a La Moncloa el año pasado.

“El 1 de octubre no va de echar a Rajoy, sino de fracturar Cataluña”. Pedro Sánchez ha regresado este sábado a Cataluña para reforzar la posición socialista de oposición al referéndum del 1 de octubre y reivindicar la reforma constitucional como la única alternativa a la situación política catalana. El líder del PSOE no ha escatimado críticas al independentismo y a su deseo de convertir el 1 de octubre en una moción de censura a Mariano Rajoy. "Pudieron hacerlo y se opusieron", ha dicho Sánchez al recordar que tanto PDeCAT como Esquerra Republicana votaron en contra de su candidatura para llegar a La Moncloa el año pasado. 

El líder socialista ha resumido el posicionamiento actual de los partidos de forma muy sintética. "Hay unos que quieren votar sin dialogar, otros que quieren dialogar sin votar", refiriéndose al PP y al independentismo. "Y después estamos los socialistas, que queremos dialogar y votar", ha añadido.
En este sentido, Sánchez ha prometido que obligará a Rajoy a "sentarse a dialogar y encontrar una solución pactada" para la crisis catalana, en el marco de la comisión de estudio del modelo territorial que se abrirá en el Congreso. "No es momento de siglas ni partidos, lo que nos jugamos va de sentimientos, de identidades y de democracia"; ha insistido el líder del PSOE.
Tanto Pedro Sánchez como Miquel Iceta, primer secretario del PSC, se han referido a la entrevista que este sábado publica EL PAIS al expresidente de la Generalitat José Montilla, y han coincidido con él en que "Rajoy se ha pasado cinco años de vacaciones sin afrontar la situación política catalana".
El líder del socialismo catalán se ha mostrado muy crítico con la utilización de la vía judicial para resolver el conflicto político y ha arremetido contra la denuncia de la fiscalía por sedición ante la Audiencia Nacional a los convocantes de protestas cuando se realizaron los registros en la Generalitat, el pasado día 20. También ha cargado contra la suspensión judicial de actos públicos en diferentes ciudades españolas en los que se iba a hablar del referéndum catalán y del derecho a decidir.
"La única respuesta del Estado no puede ser la legal y la policial. Es legítimo que el Estado intente evitar el referéndum, pero en ningún sitio se pueden vulnerar los derechos fundamentales de los ciudadanos, ni en Cataluña ni en España. No entendemos que se suspendan actos públicos y todo el mundo ha de poder defender las ideas más locas del mundo", ha dicho Iceta.
"El Estado no puede prohibir actos para que la gente se exprese. Hoy se acusa de sedición a unos manifestantes y mañana será a los piquetes sindicales. Nos ha costado mucho conquistar la democracia", ha insistido Iceta. En su opinión, "las ilegalidades se han de perseguir, pero los derechos no se pueden limitar".
Iceta ha criticado sin reparos la deriva independentista y ha acusado a Carles Puigdemont y Oriol Junqueras de ser "unos temerarios que juegan con fuego y con ventaja porque tienen delante a Mariano Rajoy, que es el hombre más previsible de la Tierra". El líder del PSC ha insistido en que la solución ha de ser política, no judicial ni policial. "Queremos un acuerdo en el que pueda estar cómodo más del 80% de los catalanes, no queremos resolver un empate por la mínima ni que los catalanes se dividan por mitades", ha zanjado.